Ah, el maravilloso mundo de los deberes escolares. Nuestra querida profesora, que siempre encuentra nuevas maneras de ponernos en aprietos creativos, nos encomienda una tarea digna de Sherlock Holmes: escribir un cuento que comience con una frase memorable escuchada en alguna conversación real. ¿Y cómo logramos tal hazaña? Con libreta en mano, claro, como intrépidos …