
Municipio situado al sureste de la provincia, en las Sierras Subbéticas, incluido en el Parque Natural de la Sierra Subbética, que presenta un relieve de fuertes elevaciones calizas y valles poblados de encinares, quejigales y álamos blancos en las riberas de los cursos de agua. La agricultura tiene como principal actividad el cultivo del olivar. En su término se encuentra parte del embalse de Iznájar, que aporta al paisaje un elemento de gran interés paisajístico.
El pueblo se extiende al pie de la Sierra de Rute, formado por calles en cuesta, de casas blancas y limpias, ofreciendo un conjunto muy atractivo e integrado en el entorno. Es conocido, además, por la elaboración de licores y aguardientes.
Su ubicación, prácticamente equidistante de cuatro capitales andaluzas, su legado histórico, su gastronomía, así como el medio natural en el que se enclava (con gran parte de su término municipal incluido en el Geoparque de las Sierras Subbéticas), hacen de Rute un destino ideal para disfrutar del tiempo de ocio.
Historia
Su nacimiento es probablemente árabe. De la antigüedad del lugar hablan sus lápidas y sepulcros romanos encontrados en la villa, aunque de la época prehistórica hay documentados dos yacimientos: La Cueva Negra y El Camorro.
Está bajo el dominio musulmán hasta 1240 en que es conquistada por Fernando III, volviendo a perderse para ser reconquistada por Alfonso XI que la puebla con cristianos. Hacia 1315 en las guerras civiles de Castilla queda desguarnecida la villa, siendo atacada por Ozmir que la conquista y mantiene hasta 1341. Volverá a perderse y será conquistada definitivamente por Ramir Sánchez de Barrionuevo, a quien se la entrega en merced el Rey Juan II(1434).
Ramir Sánchez traslada el sitio de la población al lugar que actualmente ocupa.
El hijo de Ramir Sánchez perderá el señorío de Rute por deslealtad a la Corona, entregándosela Enrique III en 1466 a Diego Fernández de Córdoba, Conde de Cabra, como recompensa por la ayuda prestada en la toma de Écija; Juan Fernández de Córdoba, deán de la Catedral de Córdoba, heredará la villa como mayorazgo unido a los señores de Baena y condes de Cabra y Sesa.
Motivos para visitar Rute
El visitante que llegue a Rute se verá inmediatamente atraído por su espectacular entorno natural, un paisaje que combina olivares y vegetación serrana. El pueblo, además de un buen patrimonio monumental de marcado estilo andaluz, posee una excelente infraestructura de restauración y alojamiento.
Son fechas señaladas en la localidad la festividad de San Marcos, el día 25 de abril, o la Feria de la Virgen de la Cabeza, que se celebra la segunda semana de mayo.
Y no podremos marcharnos de Rute sin haber probado y comprado sus reconocidos vinos y licores, sus ricos dulces navideños, sus excelentes jamones y su afamado aceite de oliva.

Fuente de la imagen: Turismo de la Subbética
Iglesias y museos de Rute
Gran parte del patrimonio monumental de esta villa es religioso, siendo el edificio más reseñable la Iglesia de Santa Catalina, del siglo XVIII. Cuenta con tres naves que están rematadas por bóvedas, y con un bello retablo en su altar mayor.
El recorrido monumental también incluye la Capilla de la Residencia Juan Crisóstomo Mangas o la Ermita de la Veracruz. Esta última posee una destacada imagen de “Cristo atado a la columna”, del siglo XVII.
Y hay que reservar tiempo para visitar los museos temáticos de la localidad. Todos están relacionados con los exquisitos productos de la zona, como el Museo del Anís, el Museo Artesanal del Mantecado, el Turrón y el Mazapán o el Museo del Jamón.

Fuente de la imagen: Turismo de la Subbética
La oferta gastronómica de Rute
Hablar de Rute es hacerlo de sus afamados productos artesanales, como el anís y otros licores, que se realizan en una destilería del pueblo, impregnando el aire de un dulce aroma.
Los dulces de Navidad locales, como polvorones, turrones y mazapanes, son muy reconocidos no sólo en Andalucía, también en el resto de España e incluso fuera de nuestras fronteras.
Otro de los productos estrella es el magnífico aceite de oliva virgen local, que se elabora a partir de los numerosos olivares que rodean la población. Y completan la oferta los estupendos jamones y chacinas de Rute, que son secados al aire de la sierra.

Fuente de la imagen: Turismo de la Subbética